El trabajo ocupa gran parte del tiempo de nuestra vida, por
eso es tan importante sentirnos a gusto en el espacio en el que vamos a
desarrollar nuestras tareas. Un buen espacio nos ayudará mejorar nuestra
motivación y rendimiento. No siempre tenemos la oficina perfecta, en algunas
ocasiones se nos hace demasiado pequeña y no podemos cambiar el tamaño de dicha
construcción, pero podemos sacarle el máximo rendimiento a nuestro
reducido espacio y conseguir que sea perfecto, sin necesidad de hacer reforma.
¿Quieres saber cómo?
- La
imaginación y la creatividad:
Úsalas para crear un espacio agradable en el que te guste trabajar. Plasma tu
estilo personal sin olvidar que debe ser un espacio profesional, nos
preocuparemos de no utilizar demasiadas fotografías y accesorios personales.
- Debemos tener muy en cuenta los colores que vamos a utilizar, ya que si los elegimos bien, conseguiremos crear un
ambiente agradable y ganaremos amplitud:
Blanco, Beige, tonos pastel para crear espacios amplios con ambientes tranquilos y relajados.
Colores más animados como verde, amarillo y naranja, en los casos en que nuestro trabajo requiera desarrollar la creatividad y actividad cerebral.
- Define un estilo y mantén coherencia y armonía entre Muebles, colores y accesorios.
- Elección y
situación del escritorio: Debe ser
funcional, si el espacio es reducido, buscaremos un tamaño mediano evitando
ocupar demasiado espacio para no sentirnos agobiados y lo situaremos siempre
de tal forma que desde el podamos observar toda la oficina.
- Si tras decorar tu oficina, tienes la sensación de que es demasiado fría, es hora de poner algunos detalles que le harán ganar calidez y conseguirán un toque personal como plantas o cuadros.
Fuente: www.i-decoracion.com
Imagen: www.cnd.homedit.com