Porque mantener la casa fresquita este verano, no tiene porqué ser nada complicado, aquí te dejamos múltiples y variadas opciones, para que elijas… ¡las que más te gusten!:
- Los toldos en los edificios son una buena opción, proporcionan sombra a las ventanas y mantienen el calor, protegiendo nuestros muebles de los rayos del sol.
- Edificios recubiertos por vegetación, la plantas aportan frescura y pueden llegar a reducir la temperatura interior hasta un 50%, sorprendentemente, en los meses más fríos también nos ayudarán a mantener el calor. También conseguiremos reducir las temperaturas si colocamos cerca un árbol alto que proporcione sombra a la vivienda durante el verano.
- Es imprescindible, el aislamiento de paredes con el objetivo de que el calor no traspase y que podamos protegernos también del frío.
- Ventilador de techo, esta práctica forma nos ayuda a aprovechar mejor el aire y las corrientes.
- Extractor de ventilación que permite la renovación del aire de forma continua en la
vivienda. - Instalación de contraventanas permitiendo dejar pasar el aire y protegiéndonos del frío en invierno. De la misma forma, conseguiremos ahorrar en aire acondicionado si mantenemos bajadas las persianas, evitando que el sol incida en el interior de las instalaciones.
- Barbacoas de exterior, cocinando en el exterior no necesitaremos aire acondicionado y además evitaremos calentar nuestra vivienda.
- Colocación de las ventanas a una altura considerable, en la actualidad no se tiene muy en cuenta en el diseño y la construcción de viviendas debido al auge del aire acondicionado pero permite aprovechar las corrientes de aire para apaciguar el calor.
Fuente: elblogverde.com