La Federación Hipotecaria Europea (EMF, por sus siglas en inglés) está trabajando en una iniciativa consistente en la financiación de viviendas respetuosas con el medio ambiente.
Se trata de un sello oficial europeo que garantiza que la hipoteca que se vaya a firmar cumple con todos los criterios internacionales que definen un producto sostenible, es decir, que se trate de una hipoteca verde.
A través de esta etiqueta, el usuario que pide dinero prestado para comprar una casa nueva, soportará un coste inferior si la vivienda cumple con las exigencias de eficiencia energética o si lleva a cabo una reforma que incremente su sostenibilidad.
Además, dicho sello, ayudará a impulsar la construcción de viviendas sostenibles.
Según la EMF, una hipoteca es verde cuando está dirigida a financiar la construcción, compra o, incluso reforma, de edificios y viviendas en los que el rendimiento energético cumple con todos los requisitos y condiciones que doten a estos inmuebles de un certificado de eficiencia energética y sostenibilidad.
Si bien es cierto que, en un principio, esta implementación puede no ser rentable para el sector bancario en el corto plazo, una hipoteca verde sí que lo es en el largo plazo.
Y es que la demanda de esta nueva forma construcción y adquisición de viviendas es creciente a medida que la ciudadanía está cada vez más sensibilizada con el respeto y el cuidado del medio ambiente.
Desde Cando, constructora gallega en Santiago de Compostela (La Coruña), somos también conscientes de la importancia contra el cambio climático y tenemos muy en cuenta la eficiencia energética en nuestros proyectos.
Fuente: El País
