Los toldos pueden convertirse en tus mejores aliados, porque si tienes una terraza en la que te da mucho el sol, estos te proporcionaran la sombra necesaria para que puedas reducir algunos grados la temperatura y disfrutes de tu terraza en los días más calurosos.
Pero si además, vives en una comunidad lluviosa como Galicia, Asturias o Cantabria, te interesará saber que si eliges bien el material de tus toldos, también podrás evitar que la lluvia los traspase cuando llueva.
Aunque en principio los toldos fueron inventados para poder quitar el sol, algunos fabricantes ya incluyen en su fabricación algunos tejidos y sistemas impermeables.
De esta forma, los toldos consiguen una doble funcionalidad que aporta mayor confort y bienestar.
Estos toldos se fabrican con lonas waterproof, lonas acrílicas , lonas en PVC y lonas técnicas. Dependiendo de la intensidad y cantidad de lluvia que suela caer y su uso, los profesionales podrán recomendarte el más adecuado.
Los toldos podrán tener una inclinación u otra en función de las necesidades, incluso también existen sistemas que ayudan a evitar la filtración de agua de lluvia procedente de los laterales.
Por otro lado, también existen pérgolas que son estructuras con guías, lonas y lamas que evitan que el agua se filtre en el interior. Algunos especialistas los consideran como un sistema arquitectónico de construcción. Este sistema, evita que el agua entre por los laterales, la parte trasera y también la frontal.
No dudes en contar con profesionales, para que te ayuden a elegir el que más se adapte al tipo de vivienda o local en que quieres instalarlo, además tendrán en cuenta factores como la localización y las condiciones meteorológicas y realizarán la instalación, colocando los toldos de forma segura, anclados correctamente.
Fuente: Vecologic
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